Aprendiendo a sentirnos
bien
Así como los
artesanos necesitan buscar cuidadosamente sus
materias primas que transformarán en hermosos objetos, piezas de arte,
nosotros también debemos buscar las materias
primas que nos transformarán construyendo así nuestro bienestar.
Y cuando
hablamos de materias primas, hablamos de esa materia que ocupa un espacio, que
tocamos, que sentimos, que olemos y hasta medimos, pero que se transforma en
nosotros haciendo que nuestra calidad de vida aumente, que logremos ese sentirnos mejor anhelado.
Y en este caso comenzaremos con algunas de las cuales nos son comunes a todos: el aire y el agua.
¿Sabías que
cuando naciste no pasaron veinte segundos hasta que el aire entrara a tus pulmones? Ya sin placenta comenzaba tu cuerpito a tomar el control de su metabolismo y bastaron
cinco minutos para que te fueras adaptando al aire libre.
El aire, la
respiración, la vida… esos cinco minutos de gloria que debimos valorar con el
correr del tiempo y perfeccionar, lo hemos considerado solo como una función más , necesaria para vivir, pero
no para vivir sanos y saludables, ya que
para esto hace falta un esfuercito más.
Hoy
conocemos el impacto de la respiración
en nuestro organismo; nos ha llevado años aceptarlo aunque la respiración como
herramienta sanadora es milenaria.
Todo nuestro
organismo esta involucrado con el largo camino que recorre el oxigeno por nuestro cuerpo generando la
energía que necesitamos ... no nos quedemos solo en como funciona el
diafragma y el tórax cuando respiramos y
si sube o baja el abdomen al respirar…
pensemos que el proceso de respirar, de tener la suficiente oxigenación mejora
toda nuestra salud ya que todo nuestro organismo está involucrado en este proceso,
comenzando por el sistema respiratorio y siguiendo por el circulatorio.
La sangre, solo en su circuito menor, transporta el
oxígeno desde los pulmones hasta las células y el CO2, perjudicial para el cuerpo, hasta los
pulmones para que éstos lo expulsen.
Y esto es
solo el comienzo…
Para
comenzar, te propongo que cada día, en
cualquier horario, encuentres unos minutos para cerrar los ojos, o si prefieres
busca un lugar agradable donde fijar tu vista y respirar conscientemente, sintiendo
como tu aire entra en tu cuerpo y lo recorre, desde que entra suavemente por
tus fosas nasales y hasta donde llegue… no te esfuerces… déjate llevar, solo
siente…y luego expira suavemente.
Esto debes
hacerlo mínimo tres veces. Sentada, parada, acostada…solo ten en cuenta de
hacerlo despacio y consciente. No es mucho y te sentirás mejor, eliminarás la
tensión muscular, tu mente estará más clara y despejada… considera este momento
como parte de tu alimentación.
Segundo pilar de nuestro bienestar: El
agua.
¿Qué sabes de la importancia del agua?
Sé que sabes que es necesario consumir dos litros por día
como mínimo, que es buena para nuestra salud,
que si no lo hacemos no adelgazamos… que nos ayuda eliminar toxinas, que el no
estar hidratados puede dificultarnos el mantener la concentración, que nuestra
piel la necesita para verse mejor…
Suma ahora que nuestro corazón, nuestras articulaciones,
nuestro hígado, nuestros riñones, nuestros intestinos, nuestro colón, nuestro
páncreas, nuestra vejiga… TODO nuestro organismo está pendiente de esos vasos
de agua que cada día le aportamos… ¿porqué? Porque esta mágica sustancia nos
sana, nos purifica, nos ayuda a eliminar todo tipo de residuos que han quedado
en nuestro organismo luego de la necesaria ingesta de alimentos. El agua no
solo nos hidrata, sino que nos desintoxica previniéndonos de problemas de salud
muy específicos en la actualidad.
Médicos consultados advierten
mayores casos en problemas como colon Irritable, dolores de cabeza,
tendencia al cansancio, a sentirnos sin fuerzas… esto es producto de un cuerpo
que no está armonizado. Es un hecho, tomemos conciencia que hidratándonos el
hígado, los riñones, el sistema digestivo e inmunológico cumplen muy bien con
sus funciones, se lubrican las articulaciones y mejora nuestra piel.
Somos un todo, cuerpo,
alma, agua, aire, viéndonos integralmente y valorando lo que tenemos iremos
construyendo bienestar.
Te propongo hasta nuestro Nuevo encuentro que si no puedes tomarte unos minutos todos los dias para hacer estos ejercicios respiratorios, los hagas cada dos dias y si no puedes tomar dos litros de agua, tomes un litro... los nuevos habitos son dificiles de lograr y porque ademas, amiga...la perfeccion no existe.
Te propongo hasta nuestro Nuevo encuentro que si no puedes tomarte unos minutos todos los dias para hacer estos ejercicios respiratorios, los hagas cada dos dias y si no puedes tomar dos litros de agua, tomes un litro... los nuevos habitos son dificiles de lograr y porque ademas, amiga...la perfeccion no existe.